Objetivo: Comprobar tejido adiposo y las células que lo componen.
Fundamento teórico: Es un tejido conjuntivo especializado en el que predominan las células conjuntivas llamadas adipocitos. Representa alrededor del 15-20% del peso corporal del hombre y del 20-25% del peso corporal en mujeres. La función más conocida de éste es la de albergar la mayor parte de las reservas energéticas, ya que además posee actividades metabólicas y endocrinas que influyen sobre sí mismo y sobre otros tejidos.
Material: Portaobjetos, Cubreobjetos, Bisturí, Pocillo de tinción, Pinzas, Cuentagotas, Frasco lavador, Formol, Colorante Sudán III y un fragmento de grasa animal.
Método: Con mucho cuidado, usando el bisturí, extraemos una capa lo más fina posible de tejido y lo colocamos sobre el portaobjetos (Fig. 1.1). Añadimos una gota de formol sobre la muestra y dejamos actuar cuatro minutos (Fig. 1.2).
Fig. 1.1 |
Fig. 1.2 |
Para continuar, primero aclaramos con agua y luego añadimos unas pocas gotas de Sudán III, un colorante que se utiliza para detectar específicamente las grasas, porque es insoluble en agua y en cambio es soluble en las grasas. Al ser de color rojo, cuando se disuelve tiñe las grasas de color rojo anaranjado. Dejaremos que éste haga su función de teñir el tejido, y para ello, tendremos que esperar cinco minutos (Fig. 1.3). A continuación, volvemos a lavar la preparación con agua (Fig. 1.4), y procedemos a la colocación del cubreobjetos sobre ésta.
Fig. 1.3 |
Fig. 1.4 |
Finalmente, eliminamos el exceso de agua con ayuda del papel de filtro y ya entonces podremos acudir a la observación por microscopio.
Observación: En la preparación notamos la presencia de células poliédricas de aspecto gelatinoso a las que asociamos con cápsulas. Cada una de éstas aparece como un anillo de citoplasma rodeando a una vacuola, resultado (según fundamentos teóricos), de la disolución de una gota lipídica que contiene un núcleo excéntrico.
Conclusión: Si bien lo mencionamos antes, el tejido adiposo (o grasa como comúnmente se conoce) está constituido por tejido intercelular y por adipocitos que se encargan de almacenar ácidos grasos en forma de triglicéridos (es por ello que el colorante no tiñe el espacio intercelular, porque en éste no existe la presencia de grasas, y dicho tinte solamente tiñe las grasas). Éste se localiza en la parte más profunda de la piel (hipodermis), y por tanto, se encuentra distribuido a lo largo de todo nuestro cuerpo. Cabe destacar que no solo podemos encontrar adipocitos en el tejido adiposo, sino que también son localizables en el tejido conectivo o conjuntivo.
Por otra parte, el Formol es una solución acuosa de olor fuerte que se emplea como antiséptico, como desinfectante y en la conservación de preparaciones anatómicas; además se usa en síntesis orgánica, para producir abonos, papel, madera contrachapada, resinas de urea-formaldehído y también en la fabricación de extintores de incendio entre otros usos. Se trata de un compuesto tóxico e irritante con propiedades cancerígenas.
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